Más de 300 hectáreas de frutales en las mejores zonas de Mendoza, regadas con agua de montaña, son el origen de nuestra fruta: cerezas, duraznos, nectarines y ciruelas.
Tecnología de empaque de avanzada, sistemas de calidad y el trabajo cuidadoso de más de 120 personas avalan nuestra reconocida marca.